¿qué aspectos debe mejorar su jefe en su estilo de dirección?
Liderazgo
El desarrollo de habilidades directivas es importante para todos los profesionales. Según el Foro Económico Mundial, la gestión de personas es una de las 10 principales habilidades necesarias para prosperar en la mano de obra actual. Además, las investigaciones de Gallup muestran que las empresas con directivos con talento experimentan una mayor rentabilidad, un aumento de los niveles de productividad y un mayor compromiso de los empleados, lo que pone de manifiesto lo vital que puede ser la gestión para la cultura y el éxito de una organización.
Tanto si eres un aspirante a director como si ya tienes experiencia, hay pasos que puedes dar para mejorar tu forma de supervisar y guiar a las personas, los productos y los proyectos. He aquí siete formas de convertirse en un mejor gestor y avanzar en su carrera.
La toma de decisiones es una habilidad crucial para los directivos. Desde la supervisión de un equipo hasta la dirección de una reunión crítica, ser un directivo eficaz requiere saber analizar problemas empresariales complejos y poner en práctica un plan para avanzar.
Este principio básico de la inteligencia emocional requiere introspección y una evaluación honesta de sus puntos fuertes y débiles. Al realizar una autoevaluación y recurrir a colegas de confianza para conocer sus tendencias de gestión, puede trazar un camino para su desarrollo profesional que se centre en las áreas en las que necesita mejorar, permitiéndole sacar lo mejor de sí mismo y de los demás.
Comunicación
Si ocupa una posición de liderazgo en su empresa o pequeño negocio, sabe que la gestión de los empleados puede hacer o deshacer el éxito de su organización. Los empleados felices y trabajadores le catapultarán al éxito, mientras que los descontentos y perezosos le hundirán desde dentro.
Navegar por los aspectos sociales y de rendimiento de la gestión de sus empleados puede ser una tarea desalentadora, especialmente cuando tiene varias generaciones diferentes de empleados que tienen diferentes objetivos, motivaciones y puntos de vista sobre el trabajo.
Mediante una hábil gestión de los empleados, puede crear un lugar de trabajo funcional y eficiente aprovechando los puntos fuertes de sus empleados y motivándolos para que alcancen los objetivos del equipo. Los empleados se implicarán, estarán motivados, tendrán éxito y serán leales.
No puede gestionar a sus empleados si no sabe cómo comunicarse con ellos. Enviar mensajes es sólo la mitad de la batalla: saber escuchar a sus empleados es tan importante como transmitir su mensaje.
Con una charla significativa en el lugar de trabajo. Esto le ayudará a mantenerse al corriente de cómo les va a sus empleados y de los retos a los que pueden enfrentarse. Al mantenerse informado y comprometido, también está demostrando a sus empleados que le importan.
Honestidad
Los grandes líderes aprovechan las necesidades y los temores que todos compartimos. Los grandes directivos, por el contrario, hacen su magia descubriendo, desarrollando y celebrando lo que es diferente en cada persona que trabaja para ellos. Así es como lo hacen.
Se ha escrito mucho sobre las cualidades de un gran directivo, pero la mayor parte de la literatura pasa por alto una cuestión fundamental: ¿Qué hace realmente un gran directivo? Aunque hay innumerables estilos de gestión, hay una cosa que subyace en el comportamiento de todos los grandes gestores. Por encima de todo, un directivo excepcional llega a conocer y valorar las peculiaridades y habilidades de sus empleados. Averigua cómo aprovechar los puntos fuertes de sus empleados y ajusta su entorno para alcanzar sus objetivos más amplios.
Un enfoque tan especializado puede parecer mucho trabajo. Pero, de hecho, aprovechar la singularidad de cada persona puede ahorrar tiempo. En lugar de animar a los empleados a ajustarse a descripciones de trabajo estrictas que pueden incluir tareas que no disfrutan y para las que no son buenos, un directivo que desarrolle puestos para los miembros de su personal en función de sus capacidades únicas se verá recompensado con comportamientos mucho más eficientes y eficaces de lo que serían de otro modo.
Ejemplos de áreas de mejora para los gestores
Tanto si su organización es una operación de un solo voluntario como un gigante de múltiples programas con docenas de empleados, necesita un plan de gestión para asegurarse de que funciona sin problemas y lo hace todo. El plan de una organización pequeña puede ser, obviamente, mucho más sencillo que el de una enorme, pero la intención en ambos casos sigue siendo la misma: llevar a cabo la misión de la organización y las tareas cotidianas necesarias para apoyar esa misión y mantener la organización funcionando con la mayor eficacia posible.
Un plan de gestión es un proyecto para la gestión de la organización, tanto en el día a día como a largo plazo. Incluye los métodos estándar para hacer varias cosas -manejar el dinero, ocuparse del trabajo real de la organización, abordar la forma en que las personas de la organización hacen su trabajo- y el marco filosófico e intelectual general en el que funcionan estos métodos.
Es cierto que se necesita mucho trabajo para mantener una organización en funcionamiento. ¿Por qué no se puede hacer a medida que surge? ¿Por qué tomarse la molestia de crear un plan real para hacer simplemente lo que hay que hacer?