Clasificación de productos y servicios
ResumenLas clasificaciones de productos se han utilizado como marco normativo para generalizar las características de los productos y las respuestas del mercado. Para ser más útiles a la hora de orientar la estrategia de marketing, los esquemas de clasificación deberían incorporar las características del proceso de decisión del consumidor. Este artículo intenta establecer el vínculo entre la clasificación de productos y la teoría de la decisión del consumidor demostrando una asociación directa entre la conocida tipología de productos de conveniencia de Copeland y el modelo Howard-Sheth de toma de decisiones del consumidor.
JAMS 2, 539-552 (1974). https://doi.org/10.1007/BF02729448Download citationShare this articleAnyone you share the following link with will be able to read this content:Get shareable linkSorry, a shareable link is not currently available for this article.Copy to clipboard
Diferenciación de productos
Todo fabricante y minorista de un producto conoce los entresijos de lo que ofrece. Conocen bien las propiedades que describen a la perfección su producto y que hacen que su singularidad sea vívidamente perceptible. Naturalmente, las convenciones de denominación de la empresa, los neologismos propios y el estilo individual también determinan cómo es la descripción del surtido de productos. Todos estos aspectos son importantes a la hora de diferenciar su marca de la competencia y transmitir el sentimiento que la marca representa. Después de todo, la silla de cocina no es simplemente marrón: tiene un color cálido con un toque de rojo que brilla a través – un marrón castaño. O su producto puede presentar otras características únicas. Por ejemplo, la empuñadura del martillo es de plástico reforzado, lo que permite a su propietario utilizarlo también cerca de cables conductores de electricidad.
En conjunto, constituyen un importante criterio de decisión para que sus clientes elijan el producto adecuado. A partir de esta información, pueden comparar productos, dentro de su propio surtido, pero también con otras ofertas del mercado. Y aquí es donde entra en juego la clasificación de productos: es lo que confiere a sus datos e información sobre productos la estructura necesaria. Constituye la base perfecta para un perfeccionamiento fluido de los datos en su sistema PIM o ERP y también garantiza una rápida transferencia de datos para una presentación óptima en su tienda en línea o catálogo electrónico. En resumen: para quienes en el mundo del comercio electrónico y los negocios electrónicos desean comercializar productos a nivel internacional y global, la clasificación de productos es un tema ineludible. Otras ventajas son que sus productos se presentarán de forma mucho más clara y diferenciada, ya sea en su propio sistema interno o en los canales de venta externos. Esto, a su vez, se traduce en mayores tasas de conversión de clientes. Cómo funcionan exactamente las clasificaciones de productos, qué ventajas ofrecen y cómo puede beneficiarse de ellas: descubra todo esto y mucho más si sigue leyendo.
Mezcla de productos
Hacer esta distinción es importante en la medida en que las tres perspectivas deben ser comprendidas y satisfechas para que cualquier producto sobreviva y tenga éxito. Además, esta sensibilidad a las necesidades de las tres es el concepto de marketing en acción. Por ejemplo, una empresa puede diseñar una píldora adelgazante que no sólo sea muy rentable, sino que también tenga una gran aceptación entre los consumidores. Por desgracia, no puede cumplir las normas médicas establecidas por el gobierno federal estadounidense. Del mismo modo, Bird’s Eye Food podría mejorar la calidad general de sus verduras congeladas y, sin embargo, no mejorar la tendencia de los consumidores a comprar esa marca concreta simplemente porque esas mejoras no fueran percibidas como importantes o perceptibles por el consumidor. Por lo tanto, la valoración del producto de una empresa depende siempre de las necesidades y deseos del vendedor, el consumidor y los públicos pertinentes. Definimos producto de la siguiente manera: cualquier cosa, tangible o intangible, ofrecida por la empresa; como solución a las necesidades y deseos del consumidor; es rentable o potencialmente rentable; y cumple los requisitos de los distintos públicos que rigen o influyen en la sociedad.
Categorías de productos
La clasificación de productos organiza los productos en cuatro categorías basadas principalmente en el comportamiento de compra del consumidor, la similitud con las marcas de la competencia y el rango de precios. Clasificar los productos ayuda a los profesionales del marketing a desarrollar estrategias dirigidas a las necesidades específicas de los consumidores.
Conocer la clasificación de un producto es vital a la hora de diseñar una estrategia de marketing. ¿Por qué? Porque le permite conocer la mentalidad de la mayoría de los consumidores y el comportamiento que muestran cuando interactúan con su producto.
Por ejemplo, digamos que sus productos entran en la clasificación de “bienes no buscados” (más información al respecto en esta sección). Esto significa que probablemente tendrá que adoptar un enfoque de marketing más agresivo para llegar a consumidores que quizá no hayan considerado su producto o marca.
Piense en organizaciones benéficas, compañías de seguros de vida y funerarias. Por lo general, los consumidores no los tienen muy presentes. Por ello, estas marcas deben esforzarse un poco más para ser visibles para los consumidores y destacar las ventajas de sus productos o servicios.
En cambio, los productos de compra son muy visibles y muy competitivos. Los consumidores suelen dedicar tiempo a comparar la calidad, el coste y el valor antes de realizar una compra. Por eso, crear lealtad a la marca es vital para esta clasificación de productos.