Métodos de distribución
Aunque los canales pueden ser muy complejos, existe un conjunto común de estructuras de canales que pueden identificarse en la mayoría de las transacciones. Cada estructura de canal incluye diferentes organizaciones. Por lo general, las organizaciones que apoyan colectivamente el canal de distribución se denominan socios del canal.
El canal directo es el más sencillo. En este caso, el productor vende directamente al consumidor. Los ejemplos más sencillos son los productores que venden en pequeñas cantidades. Si visita un mercado de agricultores, puede comprar productos directamente al agricultor o al artesano. También hay ejemplos de empresas muy grandes que utilizan eficazmente el canal directo, especialmente para transacciones B2B. Los servicios también pueden venderse a través de canales directos, y se aplica el mismo principio: un particular compra un servicio directamente al proveedor que se lo presta.
Los minoristas son empresas del canal que se centra en vender directamente a los consumidores. Es probable que usted participe en el canal minorista casi todos los días. El canal minorista se diferencia del canal directo en que el minorista no fabrica el producto. El minorista comercializa y vende los bienes en nombre del productor. Para los consumidores, los minoristas proporcionan una enorme eficiencia de contacto al crear un único lugar donde se pueden adquirir muchos productos. Los minoristas pueden vender productos en una tienda, en línea, en un quiosco o a domicilio. El énfasis no está en el lugar concreto, sino en vender directamente al consumidor.
Definición del canal de distribución
En cualquier negocio, especialmente en uno centrado en el comercio electrónico, hay muchos grifos que conducen al éxito. Comprender los fundamentos de todo, desde el marketing hasta las finanzas y la logística, le ayudará a destacar entre la multitud. Un concepto importante que hay que entender bien son los canales de distribución.
Un canal de distribución es la vía utilizada para hacer llegar un producto desde el fabricante o creador hasta el usuario final. En otras palabras, la forma en que el cliente obtiene el producto tras la compra, que a menudo incluye intermediarios. Los canales de distribución pueden ser largos o cortos, directos o indirectos. En general, cuanto más complejos, mayor es el coste tanto para la empresa como para los consumidores.
Cuando un canal de distribución es “directo”, el fabricante vende directamente al usuario final sin intermediarios. Cuando el canal de distribución es “indirecto”, el producto cambia de manos varias veces antes de llegar al consumidor final.
Puede haber un solo intermediario o muchos. En definitiva, cada tipo de canal de distribución tiene sus propias ventajas e inconvenientes. Una gran organización mundial, por ejemplo, puede permitirse un canal de distribución más complejo, mientras que un fundador de comercio electrónico en solitario puede necesitar simplificar las cosas.
¿Cuáles son los 4 canales de distribución?
El marketing mix -también conocido como las “4 P del marketing”- sigue siendo tan relevante hoy como lo fue en los años cincuenta y sesenta, cuando se hizo famoso por primera vez. Las ideas centrales de ese modelo, a saber, que el éxito del marketing depende del producto, el precio, la promoción y la colocación, siguen siendo válidas. Son, en esencia, los pilares fundamentales de un buen marketing.
La naturaleza de las 4 P ha evolucionado algo en respuesta a la digitalización (por ejemplo, el software y los servicios de suscripción se han situado junto a los productos físicos o los han sustituido), pero ninguno se ha visto tan afectado como la colocación.
Los profesionales del marketing tienen que tener en cuenta más canales de distribución que nunca, ya que su público objetivo está repartido entre varias plataformas digitales. Por no mencionar que los canales de distribución físicos tampoco han desaparecido. Cada uno de ellos debe tenerse en cuenta en los modelos de negocio y las estrategias de marketing para llegar al público y generar ingresos en la era digital.
Desarrollar una estrategia de canales de distribución que lleve eficazmente sus productos al cliente final implica comprender la diferencia entre un canal directo y un canal indirecto, conocer las ventajas e inconvenientes de los distintos tipos de canales de distribución y, en última instancia, seleccionar los que mejor se adapten a su marca.
Ejemplos de canales de distribución
La forma en que adquiere los productos, los almacena y los envía a sus clientes depende de sus canales de distribución. Existen varios canales de distribución, y los tipos que elija dependerán de su modelo de negocio. Además, algunos tipos de canales de distribución son mejores que otros, dependiendo de su nicho específico.
Por suerte, tiene opciones para decidir cómo llegan sus productos a los clientes. Tanto si es una empresa de comercio electrónico como un fabricante, seleccionar la cadena de distribución adecuada es crucial para que su empresa ahorre tiempo y dinero a la vez que satisface a sus clientes. También puede mejorar sus estrategias de marketing de causas y crecimiento de productos al ayudarle a entregar sus productos a los clientes con mayor rapidez.
Un canal de distribución, también conocido como cadena de distribución, es el camino que siguen los productos desde la fabricación hasta el cliente. Por ejemplo, una empresa fabrica productos y tiene que hacerlos llegar a sus clientes. El principal objetivo de los canales de distribución en marketing es proporcionar satisfacción al cliente, y puede elegir entre varios tipos de canales. Por supuesto, cualquiera que elija repercutirá de algún modo en sus ventas, por lo que la eficacia es fundamental.